Mis apuestas en la psicoterapia le apuntan a generar cambios de manera rápida, para este fin, el proceso de realiza con base en la propuesta de psicoterapia breve, que busca centrar el proceso de conversación alrededor del problema para llegar rápidamente a resolverlo encontrando múltiples soluciones, que favorezcan la disminución de la sensación de sufrimiento.
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Nos centramos en el presente, para construir un mejor futuro, el pasado se convierte en un contexto histórico, que facilita la comprensión de como surgen las pautas que dejaron de ser funcionales y de este modo, transformarlas para crear y construir una historia más rica en matices solidarios y bondadosos.
El cambio solo surge de manera rápida si se logran tener estas condiciones para el proceso de la psicoterapia:
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Asistencia continua a las sesiones programadas, cada 8 días inicialmente y luego se realizarán en intervalos mas extensos, de acuerdo con los cambios percibidos.
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Realizar ejercicios sugeridos al final de cada sesión: en casi todas las sesiones se delegarán tareas para los consultantes con el fin de ampliar el impacto de la consulta a la vida cotidiana.
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Si es terapia familiar o de pareja, la asistencia de todos los involucrados es de vital importancia, de esto también depende que los sistemas se sientan distintos y que los problemas se resuelvan de manera efectiva.
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Calibrar el cambio, de acuerdo con los objetivos propuestos: en las primeras sesiones se establece el para que, del proceso psicoterapéutico, de este modo se reconoce cuando se han logrado los cambios esperados para cerrar el proceso.
Este marco general aplica para todos los niveles de intervención que se proponen a continuación.